PURA nació casi de casualidad
Como familia hace tiempo que llevamos una alimentación real, lejos de los ultraprocesados. La motivación inicial por por salud: un diagnóstico que llevó a revisar los hábitos en profundidad. Hacer las propias mantequillas fue un eslabón más de todo el camino.
Con la llegada de nuestra cachorra humana la revisión de los alimentos se hizo todavía más exhaustiva: la responsabilidad de entender en profundidad qué le damos para que pueda crecer con las mejores posibilidades fue natural y compasiva.
La mantequilla de nuez apareció como un recurso excelente para poder darle omega 3. La de maní por la proteína... así se fueron sumando de a una. Al probarlas, nuestro entorno nos comenzó a pedir... y casi sin querer queriendo, surge PURA MANTEQUILLA, que es nuestra manera de compartir este tesoro con el mundo